La práctica es una palabra clave para entender la
no-violencia. Un enfoque no-violento asume que la gente adopta papeles activos,
tomando decisiones, aceptando responsabilidades y añadiendo su experiencia.
También representa un desafío constante: entretejer la diversidad de las
experiencias individuales dentro de una visión siempre cambiante. No hay una
"definición" fija o estática de la no-violencia.
La no-violencia
es activa. Aunque para algunos la palabra no-violencia implica pasividad, la no
violencia es, en realidad, una forma activa de resistencia. Analiza las fuentes
de la violencia institucional e interviene desde un nivel filosófico y político
a través de acciones directas y persistentes.
La no-violencia es una
salida llena de recursos con posibilidades para el cambio en uno mismo y en los
demás, y con el poder de actuar sobre la base de esas posibilidades. La mayor
parte del trabajo para convertirse efectivamente en no-violento reside en
eliminar los prejuicios que no nos permiten ver esos recursos.
Deshacer la violencia dentro de nosotros mismos supone
desafiar el mito de que no somos lo suficientemente buenos, inteligentes o
hábiles para actuar. La mejor manera de hacerlo es intentarlo, trabajando al
principio con amigos o en grupos pequeños, y empezando con dramatizaciones o
con actividades menos intimidantes como repartir panfletos. A medida que la
confianza en nuestros propios recursos aumente, nos volveremos más capaces de
apoyarnos mutuamente a la hora de mantener nuestras acciones no violentas.
Información extraída de: http://www.sindominio.net/afe/dos_mediactivismo/guiadesob.pdf
1 comentario:
La desobediencia civil es un medio no un fin, tratais esta motivación como el fin mismo de una voluntad cívica rebelde, pero no argumentais de forma clara cual es el fin, o que se propone conseguir, ME GUSTA vuestro blogg, me hago adicta a él.
PD. Muchas veces creo que si no tuvieramos esta crisis este tipo de blogg serían mera anécdota, cuando deberíamos tener una mente crítica tanto en los buenos como malos tiempos.
Publicar un comentario